Conocido popularmente como bullying, el acoso escolar puede presentarse en distintas formas. Una de las más preocupantes y retiradas es la virtual -ciberbullying-, donde el hostigamiento se traslada al ámbito de internet, agravado por el anonimato.
“Las redes potencian el problema”, aseguró Juan Pablo Scarpinelli, licenciado y profesor en Psicología y magister en Familia. “Quitan al adulto del juego y queda la víctima muy expuesta ante la posibilidad de una cuestión sistemática”, agregó.
En diálogo con Matías Sáez y Albino Aguirre por "Todo no se puede", el también consultor en Salud y Adicciones sostuvo que “faltan estudios serios sobre el impacto de la tecnología en los vínculos humanos sobre todo en la adolescencia, que es una edad de muchísimo movimiento y vulnerabilidad”.
“No hay un conflicto concreto por el cual se inicia y se perpetúa sin ninguna lógica, no tiene objetivo ni final, es una satisfacción en el deterioro subjetivo del otro”, indicó acerca de la problemática.
Además, hizo hincapié en el rol de los observadores, que se suman al acosador y la víctima para conformar el trío que compone la situación de bullying: “Participan de forma aparentemente neutral y son quienes realmente le dan sentido”.
Según la ONG Bullying sin Fronteras, en los últimos 12 meses se registraron cerca de 3 mil casos que generaron al menos 120 intentos de suicidio en chicos de primaria, secundaria y hasta jóvenes universitarios.
Sobre el modo de prevenir estas situaciones, Scarpinelli subrayó: “La persona que es considerada indefensa por su silencio, su falta de integración al curso, sus gustos, sus intereses o su carácter introspectivo, tiene que estar integrada en una red en la que pueda hablar de lo que le pasa”.
Junto con otros profesionales, el especialista participó de las capacitaciones para jóvenes y adolescentes que impulsó FM CIELO 103.5 en distintos colegios de la ciudad durante este mes.
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