El vicegobernador de la provincia de Santa Fe, Jorge Henn (UCR), manifestó que la alianza electoral del partido centenario con el PRO fue "la peor decisión de la historia del radicalismo" porque Ernesto Sanz "hizo un acuerdo con quienes representan cuatro barrios conchetos".
El referente radical dijo a la prensa que "ahora hay que reconstruir" el espacio político, y "trabajar por una alternativa progresista desde la UCR" porque "la estrategia y la elección que hizo el radicalismo (en las PASO) dan ganas de llorar" y juzgó que la postulación de Sanz “entregaba” al radicalismo a un “partido de centroderecha como es el PRO”.
Las declaraciones de Henn no fue la única reacción crítica puertas adentro de radicalismo hacia la estrategia electoral de Sanz, tras el 3,5 por ciento de los votos que el titular del partido cosechó en las primarias del domingo pasado, la segunda marca más baja de la UCR en una elección, luego del 2,3 por ciento que sacó Leopoldo Moreau en las presidenciales de 2003.
"Ese acuerdo vergonzante, determinado por la especulación, el cálculo y una sobredosis letal de pragmatismo, presentado como 'posible, ventajoso y ganador' (latiguillo usado por Sanz para justificar la alianza con el PRO) finalmente resultó perjudicial, ruinoso y derrotista para el radicalismo”, disparó en un comunicado la agrupación Democracia Radical, que encabeza el dirigente Rodrigo López Tais.
Un sector del radicalismo cordobés reclamó ayer la renuncia del senador mendocino al frente del Comité Nacional de la UCR por exponer al partido a la "derrota más humillante que se recuerde en su centenaria trayectoria democrática”.
Ahora en el Comité Nacional sacan números y especulan en que si los resultados de las PASO se repitieran en octubre, la UCR no sólo aseguraría su condición como principal fuerza de oposición en el Congreso Nacional, sino que además sumaría legisladores a sus bloques en ambas cámaras.
En la Cámara baja, los radicales -que ponen en juego 12 bancas- sumarían cuatro diputados, a los 35 que actualmente conforman el bloque.
De esa manera, el partido alcanzaría los 39 diputados, en base a los 23 que aún tienen mandato hasta 2017 y los 16 que ingresarían el 10 de diciembre como consecuencia de los resultados de las elecciones legislativas de octubre, mientras en el Senado, donde renuevan siete bancas, de un total de 11, sumarían sólo una.
Los radicales también apuestan a quedarse con al menos cinco de las gobernaciones que se ponen en juego el 25 de octubre: son las provincias de La Pampa, Jujuy, Tucumán, Catamarca y Santa Cruz. Además de incrementar el número de intendencias dominadas por el centenario partido.
Luego de compartir el lunes una conferencia de prensa con Mauricio Macri, ganador por amplio margen en la interna de Cambiemos y la otra perdedora de la contienda, Elisa Carrió (Coalición Cívica-ARI), Sanz prefirió mantener un bajo perfil, algo que abandonará la semana próxima y reaparecerá en la escena electoral cuando viaje a las provincias de Tucumán y Chaco, provincias que eligen gobernador en agosto y septiembre, respectivamente.
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