Se puede decir que el Ministerio de Seguridad es el que más modificaciones sufrió en lo que va de la gestión Vidal. Eso sí, más allá de rumores que circularon en algún momento, el ministro continúa siendo el mismo: Cristian Ritondo. Quien no aguantó a los rumores y las denuncias públicas (incluidas las de la diputada nacional Elisa Carrió) fue el jefe de la Policía, Pablo Bressi, quien en octubre del año pasado, luego del pase a retiro, fue reemplazado al frente de la fuerza por Fabián Perroni.
También hubo modificaciones más abajo, en las veintiuna superintendencias y en las treinta y dos departamentales. A continuación, cada uno de los cambios y los respectivos porqués. Entre ellos, Enrique Sobrero, ex jefe de la Departamental La Matanza, quien fue separado del cargo sospechado de corrupción.
MINISTRO DE SEGURIDAD: CRISTIAN RITONDO
Varias veces sonó para pegar el salto a la Nación, e incluso se especuló con su llegada a la Cámara de Diputados para tomar las riendas de la presidencia, en reemplazo de Emilio Monzó. Nada de eso ocurrió. El hincha de Independiente asegura que se siente cómodo con su rol en el Gabinete de María Eugenia Vidal y como una de las caras de la lucha contra las mafias en la provincia de Buenos Aires. A pesar de eso, el hecho de pertenecer al equipo de Cambiemos no lo vuelve hostil a un hipotético cambio en las funciones. “Juego donde me toque jugar”, comentó hace un tiempo a La Tecla.
JEFE DE LA POLICIA BONAERENSE
Pablo Bressi: Fue el primero de los jefes de la Bonaerense dispuesto por el ministro Ritondo y fue muy cuestionado internamente. La principal retractora del proceso de Bressi fue la diputada nacional Elisa Carrió, quien vivió como un triunfo propio su salida del Ministerio de Seguridad provincial. Salió del equipo el 9 de mayo de 2017, tras decisión del Ejecutivo. Antes de su salida había estallado un resonante caso de corrupción con la Planta Verificadora de Automotores, que derivó en la detención del Comisario Mayor Alberto Miranda.
Fabián Perroni: El hombre en cuestión era el número dos de Bressi. Estaba al frente de la coordinación del Operativo de Seguridad y subió un escalón al concretarse la dimisión del primer jefe policial de Cambiemos. En las últimas semanas, sus declaraciones mediáticas sobre la relación directa en el incremento de la inseguridad con los índices de pobreza lo pusieron en el centro de la escena, y se especuló incluso con una posible salida. El agua pasó debajo del puente y, finalmente, los ánimos detractores quedaron subsanados.
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